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Penetrar a una mexicana por el ano siempre había sido el deseo de este hombre. Pero, nunca lo había podido hacer. Por ello, un día le dice su fantasía a su mejor amiga y esta le dice que se lo cumplirá. En ese momento, se van a un hotel y ella se le coloca en cuatro patas después de practicarle el sexo oral. Ella le dice que la penetre primero por el coño para calentarse al máximo y luego le devore el ano. El hombre encantado lo hace y se satisfacen de placer. ¿Quién no quisiera tener una amiga así?
